Nos reíamos y todo parecía perfecto. Pero tal vez arriesgamos demasiado.
De repente, sentí frío. Y como en un sueño, todo pareció suceder envuelto en la niebla de las confusiones.
Apenas recuerdo poco más. Bailábamos juntos al borde de aquel hermoso acantilado. El sonoro vals del océano intentaba acompañarnos, pero nuestros cuerpos flotaban con su propia música. Tu mirada cegada por la brillante puesta de sol. Mi perfume que te embarga. Y tus cálidas manos que se aferran a mi cuerpo con firmeza.
...
...
Hasta que todo empieza a vibrar, de interior a exterior, como un seismo. Y tus manos empiezan a resbalar por mi piel; alejándose. Intento sujetarte. Pero me falta fuerza y caes al océano. Desapareces.
Cinco minutos sin respirar... y me lanzo a salvarte. Y el agua cristalina se convierte en lodo.
Todo es oscuridad y silencio.
¿Donde estás? ¿Perdido para siempre? No logro ver más allá de mi angustiado corazón palpitante, necesitado de noticias tuyas... que no llegan jamás.
Como en una pesadilla, Todo es la Nada.
PD: Debido a problemas con mi ordenador no he podido subir estas entradas en las fechas que fueron escritas, hasta hoy. Siento el retraso y la acumulación repentina.